Playa del Carmen a 08 de mayo del 2017.
Carta pública, sobre la discapacidad y la discriminación en el Sector Educativo de Q. Roo.
«Distinguida Secretaria de Educación de Quintana Roo.
Marisol Alamilla Betancourt.
Presente:
Sin pretender sumarnos a una campaña de linchamiento, derivada de sus desafortunadas declaraciones, relacionadas con los niños y niñas con requerimientos de educación especial, es necesario hacer las siguientes precisiones.
1. Es evidente que sus declaraciones, han sido sacadas de contexto y que usted no manifestó en forma directa, ningún tipo de discriminación hacia los niños y niñas con alguna discapacidad.
Sin embargo, la absurda justificación que esgrimió para no aceptar alumnos en las disciplinas de la educación especial, de hecho es discriminatoria ya que condena a los niños y niñas con capacidades diferentes, a continuar padeciendo las debilidades del Sistema Educativo que usted encabeza.
Debilidades que se caracterizan por una muy baja cultura de la inclusión y por grandes carencias en recursos humanos, instalaciones, programas y los materiales necesarios para cumplir, al menos de manera elemental, con sus obligaciones de brindar oportunidades por igual a todos los niños y niñas de Q. Roo.
2. Su declaración descansa en la suposición, evidentemente falsa y absurda, de que las labores de la Secretaría de Salud, reducirán la incidencia de las discapacidades (Se sobreentiende que en el corto plazo).
Queda claro, que se trata de un error discursivo, no sustentado en ninguna estadística válida y que además da muestra de su desconocimiento de esta sensible actividad bajo su responsabilidad.
3. Quizás su atrevimiento verbal, deriva de la falta de estadísticas válidas en su Dependencia y en su personal desconocimiento e insensibilidad, ante la permanente ansiedad y sufrimiento de muchos padres y madres de familia que día a día, tienen que suplir las carencias y la indiferencia de las instituciones públicas de educación, para darle a sus hijos e hijas, el trato y la protección que no se reciben de parte del Sector que usted encabeza.
Es lamentable que ahora, a todas esas carencias y debilidades, deba también sumarse su determinación institucional de suspender la formación de nuevos profesionales en educación especial.
4. Si su justificación obedece a la estrechez de recursos públicos, debo decirle que su postura oficial, sólo acredita la marginación de los menos favorecidos socialmente, a quienes funcionarios de alto nivel como usted, simplemente condenan por ignorancia o insensibilidad. Sra. Secretaria, eso sí es un acto imperdonable de discriminación.
Hoy mismo, muchos niños y niñas quintanarroenses padecen a diario por la falta de capacidad de atención de parte del Sector del que usted es responsable.
5. Es falso, que las discapacidades vayan a disminuir en el corto plazo. Reconocemos los esfuerzos del Sector de la Salud, pero una simple consulta a cualquier especialista en salud pública, le podrá aclarar que pasarán varias generaciones, antes de poder avanzar en algunos temas.
Seguramente usted con su formación Doctoral, sabe leer estadísticas y podrá ver las incidencias de las diferentes manifestaciones de estas condiciones de vida, en países como los Estados Unidos, Francia, la Gran Bretaña y en general en los países desarrollados.
Es por la existencia de las discapacidades y por la continua discriminación que viven quienes las padecen, que se ha gestado un movimiento mundial en favor de la inclusión, que usted parece desconocer o ignorar de manera intencional.
6. La frivolidad de sus expresiones, son lamentablemente un verdadero acto discriminatorio, que segrega a muchos niños y niñas que hoy necesitan atención especial y que no la están recibiendo y a muchos otros que en los años venideros, usted simplemente ya decidió negarles su derecho de ser atendidos con calidez, con alta especialización y con amor.
Asumiendo que sus expresiones las dijo “Sin intención”, sólo para salir del paso ante el reclamo de los jóvenes, no significa que su ligereza verbal, no tenga como consecuencia, mostrarle ante la sociedad como una funcionaria inconsciente, que desprecia o no valora el sufrimiento de las madres y padres de familia que viven a diario la indiferencia y la discriminación de sus hijos y lo peor, que significa la postura oficial del Gobierno del Estado del que usted es portavoz en el Sector de la Educación. Gobierno que ofreció la cercanía y la sensibilidad para con la población que le otorgó su confianza.
Es lamentable y merecería de su parte una profunda reflexión y una pública rectificación.
Agradezco su atención.
Atentamente.
Gabriel Mendicuti Loría.
Padre de un niño con autismo.»