La NOM-059 es la Norma Oficial Mexicana que identifica las especies o poblaciones de México en riesgo mediante la aplicación del Método de Evaluación de Riesgo de Extinción de Especies Silvestres de México (MER).
El manatí (Trichechus manatus) es una de las especies que se encuentra en la categoría de peligro de extinción según esta norma.
Algunas razones por las que no se debe manipular a un manatí son:
Es un animal silvestre que puede reaccionar de forma agresiva o asustarse si se siente amenazado o invadido por los humanos.
Es un herbívoro que se alimenta de plantas acuáticas y necesita consumir una gran cantidad al día para mantener su peso y salud.
Si se le ofrece otro tipo de alimento o se le interrumpe su alimentación natural, puede afectar su nutrición y digestión.
Es un mamífero que necesita respirar aire cada cierto tiempo y que tiene una piel gruesa y sensible.
Si se le mantiene fuera del agua o se le toca sin cuidado, puede sufrir estrés, deshidratación o lesiones.
Es una especie que tiene una reproducción lenta y que enfrenta muchas amenazas como la caza, la pérdida de hábitat, la contaminación, el cambio climático y las colisiones con embarcaciones.
Si se le molesta o se le separa de su grupo, puede afectar su supervivencia y la de su población.
Por estas razones, es importante respetar al manatí y a su hábitat, y evitar cualquier contacto o interacción que pueda perjudicar su bienestar o conservación.
El manatí es un animal fascinante y valioso para el ecosistema y la cultura mexicana, y debemos protegerlo y admirarlo desde la distancia.
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