El mal clima y la constante presencia del sargazo han causado estragos en la industria turística náutica de Playa del Carmen, con varias embarcaciones que han sucumbido a estos desafíos, afirmó José Gómez Burgos, secretario de la Cooperativa Turística Mar Caribe.
Gómez Burgos explicó que los operadores de los botes se enfrentan a periodos irregulares de actividad, con semanas de operación fluida interrumpidas por otras en las que se ven forzados a cesar sus operaciones.
El secretario señaló que, aunque las condiciones climáticas adversas son una realidad inherente a su línea de trabajo, la presencia del sargazo ha exacerbado estos desafíos, ya que las olas cargadas de estas algas pueden llegar a inmovilizar las embarcaciones.
Durante el mes de abril, por ejemplo, se registraron hasta dos hundimientos diarios atribuidos al sargazo, debido a que las densas masas de algas pueden enredarse en los motores de las embarcaciones, deteniendo su movimiento.
Aunque las condiciones climáticas adversas pueden superarse a medida que el clima mejora, Gómez Burgos subrayó que el sargazo representa un problema persistente y profundamente perjudicial para la industria.
Criticó la falta de acción por parte de las autoridades federales y la Secretaría de Marina para contener el sargazo antes de que alcance las costas y perjudique las operaciones náuticas.
Gómez Burgos también cuestionó la calidad de la barrera antisargazo, argumentando que no ha sido instalada con la justificación de que los vientos fuertes y las olas podrían dañarla. Para él, esto indica una inversión en un producto de baja calidad.
“Es inaceptable que se haya adquirido una barrera antisargazo que no puede resistir vientos de 25 kilómetros por hora, considerando la cantidad de dinero que se gastó en ella”, criticó.
Acusó a las autoridades de manejar inadecuadamente el problema del sargazo, excusándose con la posibilidad de que la barrera de protección pueda resultar dañada, lo cual indica una compra de mala calidad.
Gómez Burgos concluyó que, mientras las autoridades esquivan la responsabilidad, los operadores de embarcaciones se ven obligados a lidiar con el sargazo, lo que ha llevado al hundimiento de varias embarcaciones y ha afectado severamente al sector.
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