Desde principios de 2023, las costas de Chile han presenciado una crisis ambiental sin precedentes: miles de animales marinos han sido encontrados muertos, víctimas de la gripe aviar H5N1.
Las alarmas han sonado a lo largo de todo el país, ya que la cantidad de ejemplares muertos supera los 9 mil entre diversas especies marinas, siendo los lobos marinos, los pingüinos de Humboldt, las nutrias, marsopas y delfines los más afectados.
La gripe aviar, una enfermedad que normalmente afecta a las aves, ha logrado transmitirse a mamíferos marinos, lo que ha desencadenado esta crisis. Según los datos del Servicio Nacional de Pesca (Sernapesca), la enfermedad está presente en 12 de las 16 regiones del país, mostrando una distribución geográfica alarmantemente amplia1.
De acuerdo a la información proporcionada por Sernapesca, se han contabilizado 7,654 ejemplares de lobos marinos, 1,186 pingüinos de Humboldt, 25 chungungos (una especie de nutria), 19 marsopas, 12 delfines chilenos y 1 huillín (otro tipo de nutria) muertos a causa de la enfermedad. Las costas del norte de Chile son las más afectadas; tan solo en un fin de semana se registraron más de 227 varamientos de lobos marinos muertos y 45 pingüinos de Humboldt en la región de Chañaral.
Ante esta situación, las autoridades han activado protocolos de vigilancia activa en las costas y coordinan el entierro de los animales varados con las autoridades pertinentes para evitar una mayor propagación del virus.
Una cuestión adicionalmente preocupante es que a finales de marzo, Chile reportó su primer caso de gripe aviar en humanos. El paciente, un hombre de 53 años, sufrió un cuadro grave de influenza. Sin embargo, las autoridades sanitarias de Chile han precisado que no existe transmisión de persona a persona y que los humanos contraen la gripe aviar solo por contacto con animales enfermos.
La situación es grave y requiere de una rápida y efectiva respuesta por parte de las autoridades y de la comunidad científica.
El impacto que esta crisis podría tener en los ecosistemas marinos de la región es aún incierto, pero sin duda alguna, la pérdida masiva de estas especies marinas representa un duro golpe para la biodiversidad chilena.
Comunicadores Urbanos