La Bahía de Chetumal, una región de belleza natural imponente, se encuentra en medio de una incertidumbre significativa. En su seno, el Canal de Zaragoza, un proyecto emblemático e inconcluso de la administración anterior, se encuentra en un limbo de decisiones y estudios. ¿Seguirá adelante la expansión del canal? ¿O los descubrimientos ambientales pondrán fin a este esfuerzo?
Vagner Elbiorn Vega, director de la Administración Portuaria de Quintana Roo (APIQROO), ha señalado que los resultados de los próximos estudios de batimetría y de las condiciones del arrecife de barrera serán decisivos para el futuro del proyecto. Según Vega, el plan actual de expansión del Canal de Zaragoza de 50 a 100 metros podría ser inútil si el arrecife de barrera resulta ser un obstáculo insuperable para la navegación.
Pero el hecho de que el proyecto esté en juego a estas alturas plantea serias preguntas sobre la planificación y consideración del impacto ambiental en la fase inicial del proyecto. ¿Cómo es posible que un proyecto de esta magnitud no haya tenido en cuenta su impacto ambiental potencial desde el principio?
Los estudios en curso están dirigidos a evaluar la condición de la barrera de arrecife. Si se descubre que alberga vida marina, el proyecto de ampliación del canal podría ser abandonado definitivamente. Aquí surge otra inquietud: ¿no debería haberse realizado una evaluación ambiental exhaustiva antes de prometer una expansión del canal?
La situación se complica aún más con la presencia de una barrera de arrecife viva y una ruptura que no excede los dos metros. Vega explicó que los estudios están dirigidos a determinar si es posible o no dragar o implosionar. Nuevamente, esto plantea la pregunta: ¿no deberíamos asegurarnos de que un proyecto sea ambientalmente viable antes de avanzar con los planes?
El destino del Canal de Zaragoza depende de los resultados de estos estudios, que se espera que concluyan a más tardar en julio. Pero, ¿no se han creado ya expectativas infundadas al planificar una expansión sin tener en cuenta su viabilidad ambiental?
Esperamos que esta encrucijada no sea una mera excusa para la inacción. En otras ciudades de Quintana Roo, como Cancún se están construyendo puentes enormes y se han llevado a cabo proyectos de infraestructura. ¿Por qué no se puede restaurar el acceso a embarcaciones de gran calado en Chetumal, para recuperar lo que se tenía en el pasado?
El caso del Canal de Zaragoza es bastante interesante y nos recuerda la falta de atención y planeación que ha sufrido la zona sur en los últimos años.
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