El Colegio de Ingenieros de Chetumal ha revelado que, en promedio, al menos el 30% de las construcciones residenciales de la ciudad carecen de supervisión profesional. Esta situación contribuye a un incremento en los riesgos estructurales, e incluso, puede aumentar la probabilidad de accidentes graves.
José Juan Chi Chiquil, presidente del Colegio de Ingenieros de Chetumal, enfatizó que la ausencia de un profesional en los proyectos de construcción puede tener consecuencias catastróficas.
«La decisión de no contratar a un profesional para la construcción de una vivienda puede acarrear costosas repercusiones. Si bien es cierto que cualquier profesional puede cometer errores, ya que la perfección es inalcanzable, la probabilidad de fallos se reduce significativamente cuando se cuenta con la experiencia y conocimientos de un arquitecto o ingeniero civil», explicó.
Un ejemplo reciente de esta problemática se presentó hace unos días en Chetumal, cuando una losa en construcción de un segundo piso se derrumbó debido a un error de edificación, dejando al menos a una persona herida.
El presidente del Colegio de Ingenieros subrayó la relevancia de la formación y experiencia de los ingenieros y arquitectos en el campo de la construcción. «Estos profesionales poseen conocimientos sólidos en cálculo, hidráulica, mecánica y estructuras, lo que les capacita para diseñar, construir y mantener cualquier infraestructura de manera segura y eficiente».
Chi Chiquil recordó un popular refrán que dice: «Lo barato sale caro». Explicó que esta frase cobra sentido cuando se opta por contratar a personal no especializado para ahorrar costos, lo cual a la larga puede resultar en un gasto mayor.
Reconoció la existencia de maestros albañiles con vastos conocimientos y experiencia laboral, sin embargo, subrayó que aún así, no están exentos de cometer errores en la construcción, demostrando la importancia de la supervisión profesional en estas labores.
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