A la luz de los recientes informes publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Quintana Roo, el paraíso caribeño de México, parece enfrentar una realidad menos idílica: el estancamiento de los ingresos familiares.
INEGI, en su último reporte, ha situado a los 11 municipios de Quintana Roo entre las regiones con el más bajo crecimiento de ingresos en comparación con el resto de México. Mientras provincias como Baja California y Nuevo León logran superar las barreras socioeconómicas, Quintana Roo parece estar inmóvil.
En el municipio de José María Morelos, las familias están luchando por superar un umbral de ingresos de 6,333 pesos mensuales, considerado el rango más bajo a nivel nacional. Otras regiones, como Bacalar, Felipe Carrillo Puerto, Lázaro Cárdenas y Tulum, mantienen un ingreso medio por hogar de 11,000 pesos mensuales.
Las estadísticas son igualmente sombrías en Othón P. Blanco, Cozumel, Solidaridad, Benito Juárez, Puerto Morelos e Isla Mujeres, donde los ingresos familiares se ubican en torno a los 14,000 pesos mensuales, dentro del rango “medio”.
Es relevante mencionar que, a pesar de que estos ingresos son superiores al 60% de los demás municipios del país, no han presentado mejoría desde el 2002, es decir, durante más de dos décadas, la evolución económica ha sido prácticamente nula.
En contraposición, estados como Baja California, Nuevo León, Chihuahua, Campeche, Tabasco, Tamaulipas, Sinaloa, Nayarit y Tamaulipas han logrado un avance económico significativo, con ciudadanos pasando de un ingreso medio de 14,000 pesos a cifras entre 19,000 y 24,000 pesos mensuales.
Es importante señalar que estas cifras de INEGI toman en cuenta no solo los ingresos derivados del sector formal, sino también aquellos generados por programas de asistencia gubernamental y remesas.
Estos datos proporcionan un recordatorio oportuno de que, aunque Quintana Roo puede ser un paraíso para los turistas, los residentes locales enfrentan desafíos económicos significativos. Se requiere un enfoque sólido y comprometido para cambiar esta realidad y permitir un futuro más próspero para los habitantes de Quintana Roo.
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